Cristiano Paggetti es director general de I+, entidad italiana dedicada e-Salud. Además, es experto externo para la Comisión Europea desde 1998 en el ámbito de las ciencias de la vida y la tecnología. Los días 27 y 28 de septiembre estará presente en el Congreso Intersectorial de Envejecimiento y Dependencia de Jaén, donde ofrecerá una ponencia titulada “Tecnología al servicio de los cuidados. ¿Realidad o ficción?”.
En esta entrevista aporta su visión sobre la aplicación de los avances tecnológicos en el área de los cuidados a las personas mayores, los principales obstáculos existentes y en qué áreas se produce una mayor innovación.
-¿Podría resolvernos en pocas pinceladas la propia pregunta de su ponencia? ¿Es una realidad o es ficción la tecnología al servicio de los cuidados?
-La tecnología ha alcanzado un alto nivel de madurez y es capaz de soportar una nueva generación de servicios de atención a través de una fácil interconexión entre las personas que necesitan cuidados, los servicios y los dispositivos.
Sin embargo, es importante destacar que el desafío no es la tecnología en sí misma, sino el diseño del modelo de negocio. Por lo general, la estrategia de aplicación del servicio es el factor crucial en todo el mundo, mientras que el componente tecnológico es relevante para menos del 10% del desafío global al que nos enfrentamos.
-¿Qué dificultades se observan en la implantación de este tipo de tecnología para que pueda ser utilizada por cualquier ciudadano?
-El problema principal es identificar los cuidados pertinentes que requiere cada persona, no solo por parte de los profesionales sino también de la misma persona usuaria. Otra dificultad es conocer con exactitud cuál es el impacto que se desea conseguir en relación con los recursos disponibles (concretamente en el área de las TIC). Sobre esta base, es necesario un equipo multidisciplinario para diseñar una solución adecuada y a la vez sostenible.
Este tema es realmente estratégico y esa es la razón por la que, en colaboración con la Universidad de Ulster y varios centros de referencia, organizamos cada año una "Summer school on Connect Health" multidisciplinaria (
http://www.connectedhealth-summerschool.org/) con la participación de más de 20 países. La edición del próximo año se basa en los hogares inteligentes para las personas con algún tipo de demencia.
-Como experto externo de la Comisión Europea desde 1998, ¿cree que los países europeos y la propia Unión Europea hacen lo suficiente para llevar la tecnología al ámbito de los cuidados? ¿En qué posición quedaría España en comparación con los demás países?
-Europa es líder en este ámbito y está promoviendo numerosas iniciativas para impulsar la denominada Economía de Plata. Algunos países, incluyendo España, están experimentando un gran avance en innovación dentro de la gestión de los servicios sociales y sanitarios.
No obstante, existe un gran número de oportunidades no explotadas en cuanto a nuevos modelos de servicio y conceptos comerciales. Por ejemplo, una participación reforzada de profesionales y familiares en el cuidado de las personas mayores es una de las principales áreas para futuras intervenciones.
-Dentro de este campo de actividad que gira en torno a los cuidados a personas mayores, ¿dónde existe más innovación tecnológica y en qué otros aspectos habría que investigar más?
-Probablemente, el sector que más crece en ese ámbito es el área del Internet de las cosas en entornos inteligentes. En este campo, la tendencia de las nuevas tecnologías es favorecer los servicios orientados a la autogestión de los usuarios. Estos se enfocan en la automatización doméstica y a crear soluciones flexibles de fácil aplicación.
Aquí aparece la problemática del apoyo a la labor de las personas cuidadoras en este aspecto, donde un enfoque multigeneracional podría ser una de las respuestas a esta cuestión.
-Para finalizar, ¿podría comentarnos un avance tecnológico en concreto que le ilusione especialmente de cara a los cuidados del futuro?
-Para encarar cualquier desafío específico o para crear un nuevo servicio, necesitamos un análisis previo y un adecuado conocimiento del contexto. Por eso, me gustaría enfocar mi trabajo en el campo de la recopilación de datos y ayudar a impulsar el autoinforme de los usuarios. Para ellos es realmente importante poder percibir y evaluar correctamente la calidad y los beneficios de los nuevos servicios de atención que vayan surgiendo en el futuro.